Recostada en el suelo,
con mi cabeza sobre la cama,
escuchado al silencio,
que me lastima el alma.
Escucho tu voz a veces,
que me dice que aún estás acá,
pero es otra forma de engañarme,
porque nunca jamás volverás.
Esta noche no me deja dormir,
pasan pensamientos por mi cabeza,
que relamente no sé si quisiera oir,
es que no es nada fácil para mí.
Intento cerrar mis ojos,
para alejarme de esta maldita realidad,
que hoy me encuentra aca tirada,
tratando de olvidar.
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