Fin de la obra

Recostada en el piso de esta habitación,
que no logro reconocer,
le sonrío a mi sombra,
que camina por el balcón.

Apenas puedo pestañear,
apenas puedo mover los dedos de los pies,
apenas puedo revolcarme en esta alfombra,
apenas puedo mantenerme despierta.

Gritando en mi mente,
gritando con todas mis fuerzas,
nadie puede oirme,
nadie más que yo.

Mi cara mojada, brotan las lágrimas,
puedo acariciar la desesperación,
voy buscando la calma, siento alcanzarla,
de pronto la luz se apagó y el telón cayó.

Rompecabezas

Puedo hablar con el silencio que me rodea,

puedo escucharlo también,

puedo sentir como me lastima,

mientras miro tu rostro dibujado en mi alfombra.

Ya no lloro por las noches,

pero tu recuerdo sigue estando por aquí,

es como cuando la noche es oscura,

pero puedo ver brillar una etrella más que las demás.

Veo la lluvia caer por mi ventana,

siento al viento aumentar su velocidad,

escucho a las ramas de los árboles caer,

mientras dentro de mi pasa lo mismo que alla afuera.

Puedo decir que me siento como un rompecabezas,

me desarmo más de una vez y volver a armarme, 

puede ser muy complicado, hay algunas piezas que perdí,

y quizas nunca vuelva a estar completa.