
Te veo correr a lo lejos, desclaza,
metiste tus pies en el barro,
sentiste un poco de dolor,
pero no fue motivo para detenerte.
Corrias cada vez mas a prisa
como si fuera la ultima vez,
pasaste la mano por tu rostro
porque tu nariz sangraba.
Tu boca estaba seca,
tus labios estaban rajados,
tus ojos ya no pestañaban,
y tus manos hinchadas sintiendo la presión.
De repente tu cuerpo se desplomó,
senti como se detuvo el tiempo;
a veces todavia despierto en la noche
oyendo el golpe de tu cuerpo en el suelo.
Todavía me pregunto porque corrias,
me pregunto si querías alcanzar a alguien,
o si escapabas del tiempo,
tiempo cruel, que iba a alcanzarte.
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